FRAGMENTO DEL FILM "THE MATRIX", DONDE EL PERSONAJE PROTAGONISTA, NEO, UN PIRATA INFORMÁTICO, DESCUBRE QUE NUESTRO MUNDO, EN APARIENCIA REAL, NO ES MÁS QUE UNA SIMULACIÓN DE REALIDAD VIRTUAL QUE OCULTA UN TERRIBLE SECRETO: QUE LA HUMANIDAD HA SIDO ESCLAVIZADA.
DUALISMO
ONTOLÓGICO Y MATERIALISMO
A
lo largo de la Historia de la Filosofía, se han distinguido dos
tipos de realidad, la material y la inmaterial, la primera que parece
incuestionable y, la segunda, que es propuesta por una gran cantidad
de autores y cuyo acceso sólo es posible mediante las abstracciones
de la mente.
Dualismo
Ontológico.
Los
defensores del dualismo ontológico sostienen la existencia de
dos tipos de realidades, una material y otra espiritual, mientras que
los materialistas niegan la existencia de esta última. Este
movimiento se inicio con el pensador griego Pitágoras de Samos y
tuvo su continuidad con Platón de Atenas, que separá el mundo
inteligible de las ideas del mundo material de las cosas. En general
los dualistas consideran la existencia separada de los elementos
inmateriales , no sólo las ideas sino también el alma o Dios.
La
principal dificultad que tiene la filosofía dualista es explicar
cómo se relacionan estas dos realidades separadas, cómo se produce
la comunicación entre el alma y el cuerpo o qué ocurre con esta
cuando el cuerpo muere.
Materialismo.
Esta
doctrina metafísica afirma que sólo existe un tipo de realidad, la
realidad material, por lo que declaran su ateísmo y niegan la
existencia del alma inmaterial. Emociones, ideas y valores no son más
que manifestaciones de realidades materiales. Existen dos tipos de
materialismo:
Materialismo
mecanicista: según esta forma de pensar, la realidad está
constituida por corpúsculos o átomos que actúan unos sobre otros
de acuerdo con leyes mecánicas susceptibles de ser expresadas
matemáticamente. Este materialismo fue dominante a finales del siglo
XVIII y durante el siglo XIX.
Materialismo
histórico: se ciñe al ámbito de la sociedad ya su desarrollo
histórico y económico. Aquí el ser humano es un ser material cuya
esencia consiste en producir socialmente las condiciones en las que
debe desarrollar su vida a través de la transformación material del
entorno que realiza con su trabajo. Esta forma de materialismo fue
propuesta por el pensador alemán, Karl Marx. Y es la base
filosófica de la corriente llamada marxismo.
EL
PROBLEMA DE LA METAFÍSICA
Si
vemos la historia de cualquier disciplina científica, por ejemplo la
biología o la física, y la comparamos con la metafísica, nos damos
cuenta que esta parece estancada en las mismas cuestiones de siempre
que mantiene abierta y sin aportar respuestas claras y contundentes.
Esto es lo que se denomina el problema de la metafísica.
El
planteamiento del problema.
El
primer filósofo en afrontar este problema fue Inmanuel Kant,
filósofo prusiano que, a finales del siglo XVIII, explicó en su
obra “Crítica de la razón pura”, que la metafísica, comparada
con las matemáticas y la física, no podía afirmar nada coherente
sobre los fenomenos de la naturaleza que percibimos con los sentidos
y tratamos de interpretar con el entendimiento.
Los
objetos de la metafísica, como el alma, la existencia y Dios, no nos
permiten una correcta interpretación de ellos dado que son
trascendentes, están fuera del alcance de nuestros sentidos y su
experiencia y , por lo tanto, nada coherente podemos afirmar sobre
ellos en un juicio.
Kant
negó la posibilidad de alcanzar la posibilidad de un conocimiento
científico sobre los objetos de la metafísica como alma, mundo y
Dios, pero no negó que estas ideas no resultaran útiles para el ser
humano racional ya que pueden ser inspiradoras en su dimensión
práctica y moral, guiándonos sobre lo que debemos hacer o no.
La
radicalización contra la metafísica.
Además
de las críticas realizadas por Inmanuel Kant contra la metafísica,
se alzaron otras voces en contra de esta, es el caso del pensador
positivista francés Auguste Comte. Según este pensador la humanidad
ha evolucionado a través de la historia en tres etapas, siendo la
etapa metafísica una de ellas:
Etapa
religiosa: los seres humanos se preguntan por el porqué de las cosas
y encuentran las respuestas en la personificación divina de las
fuerzas de la naturaleza.
Etapa
metafísica: ante las mismas preguntas, los seres humanos elaboran
respuestas racionales y abstractas, dejando de lado la explicación mítico-religiosa.
Etapa
científica o positiva: se deja de lado la pregunta del porqué y se
pregunta ahora por el cómo, los procesos y las regularidades de la
naturaleza y la realidad para buscar leyes y teorías positivas que
sirvan para la transformación social.
La
metafísica entra en crisis y se considerará un asunto del pasado
que debe ser superado. En el siglo XX, la corriente de pensamiento
denominada neopositivismo, afirmarán que las proposiciones de la
metafísica carecen de significado y sólo nos podemos ocupar de los
límites del lenguaje expresivo. Destacan entre este grupo de
pensadores los nombres de Rudolf Carnap y Ludwig Wittgenstein.
Wittgenstein
sostuvo que el mundo está compuesto de hechos y que el lenguaje solo
sirve para describirlos. En la medida de que no se pueden demostrar
ni percibir positivamente los hechos metafísicos, carece de sentido
hablar sobre estos.
A
pesar de estas críticas, aun hoy en día, muchos filósofos siguen
defendiendo que la metafísica es un tipo de saber racional que puede
proporcionar una gran ayuda al ser humano en la tarea de comprender
el sentido de su vida. Es el caso del filósofo francés Emanuel
Levinás.
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